Larga exposición nocturna – tiempos de exposición extremos

En mi primer post sobre técnicas y trucos fotográficos, voy a hablar sobre un tipo de fotografía que sin ser excesivamente complicada, nos ofrece unos resultados espectaculares, incluso cuando contamos con material de gama baja. Esta técnica es la de larga exposición en fotos realizadas de noche, lo que nos permite capturar mucha luz.

Hay que contar con algunos detalles sumamente importantes:

  1. Puesto que trabajaremos con tiempos de exposición altísimos (si «alto» ya se entiende por encima de 1/60″, imaginaos en estos márgenes), es fundamental que la cámara no sólo esté fija, sino que evitemos al máximo las vibraciones. Por ello, en este tipo de fotografías no nos valdrá con tener muy buen pulso y disparar a mano, sino que deberemos contar con un trípode o con cualquier elemento fijo que veamos a nuestro alrededor. En la fotografía de ejemplo, usé un banco del parque en cuestión como apoyo.
  2. No podemos utilizar tiempos de exposición extremos en horas de luz, y menos extremo si se está poniendo el sol o tenemos otras fuentes de luz. Es decir, con el cielo completamente oscuro podemos plantearnos trabajar con el máximo tiempo de exposición que nos permita la cámara, e ir disminuyendo éste en función de lo que falte para que sea completamente de noche.
  3. La abertura del diafragma debe ser inversamente proporcional a ese tiempo de exposición extremo.

Estas dos normas son esenciales para que las fotos tengan una correcta exposición y no contengan movimientos no deseados. Veamos por qué:

En la foto de ejemplo, lo que quería resaltar era obviamente el carrusel y su movimiento, que al realizarla con larga exposición, buscaba que fuera sedoso. Si nos fijamos, podemos apreciar dos tipos de enfoque:

Por una parte, el suelo, bancos y edificio de madera contiguo están perfectamente enfocados. Incluso el padre con la hija están lo están relativamente (se movieron algo durante la exposición pero mantuvieron su posición en el espacio). Por otro lado, el carrusel en sí no nos aparece como un elemento enfocado, sino como un «espectro» de luz en horizontal, en base a su eje de movimiento. También se aprecia un efecto parecido al del «humo» en la parte superior. Esto se debe a que en esta zona del carrusel no había prácticamente iluminación y sencillamente se ha captado el halo de luz que se desprende hacia al cielo. Con un tiempo de exposición bajo captar este detalle sería materialmente imposible.

Es muy importante que los elementos que queremos que aparezcan fijos estén perfectamente enfocados, como es el caso. Si no, lo que obtendremos es una foto desenfocada por completo que hace que pierda el interés por el elemento principal, que en este caso, es el carrusel. Así pues, lo que debemos tener en cuenta para realizar este tipo de fotografías es el «contraste» entre objeto largamente expuesto y el resto de la foto.

Esto se consigue evitando las vibraciones. El viento, el movimiento de la mano (por mínimo que sea), y el mero movimiento de cierre del disparador de la propia cámara pueden desgraciarnos la foto.

Una vez tenemos claro donde situamos la cámara a fin de evitar vibraciones, solo nos falta elegir el tiempo de exposición. Como hemos recalcado, en las condiciones de luz de la foto de ejemplo, tenemos un amplio margen de maniobra. Cuanto mayor sea el tiempo de exposición, más irreconocible nos quedará el objeto en movimiento, pero como no, más espectacular. Si no disponemos de un disparador externo que nos permita el modo «bulb» (hablaremos de él en otro post), normalmente las cámaras nos darán un tiempo máximo de exposición de 30″, como es el caso.

En cuanto a la ISO, debemos aplicar la más baja para que la luz no se magnifique demasiado (con estos tiempos de exposición ya se magnifica por sí sola) y para que la oscuridad no se impregne de la luz rebotada de la fuente principal, en este caso, el carrusel. No obstante, si el objeto desprende menos luz o es más pequeño, podemos subirla a 200 y observar los resultados.

Sobra decir finalmente, que para un tiempo de exposición extremo, debemos configurar la abertura del diafragma también hacia un extremo, en este caso, usaremos la abertura más pequeña (de f/22 en adelante, si vuestra cámara os lo permite). Podemos abrir más el diafragma si no queremos un efecto tan surrealista, siempre partiendo que no cambiamos el tiempo de exposición. Con estas condiciones, no podemos aplicar la configuración inversa para una correcta exposición (tiempo corto + diafragma abierto), ya que la luz que entrará no será suficiente y obtendremos un efecto congelado, a lo sumo. Eso siempre y cuando no obtengamos un cuadro completamente negro.

En esta foto se usaron los siguientes valores: abertura: f/29, tiempo exposición: 30″, ISO 100.

¿Tenéis ejemplos de fotos realizadas con tiempos de exposición similares?

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