Una de las fotografías que resultan más atractivas a la vista son las que se captan en primer plano. Una gran variedad de objetos pueden ser interesantes para tomar en primer plano. En este artículo se detallan algunas claves a tener en cuenta para lograr imágenes con una óptima calidad.
La esencia de la fotografía en primer plano se logra acercando la cámara al sujeto pero también puede emplearse un trípode para este tipo de imágenes. Acercar bastante el equipo al sujeto genera un mayor desenfoque de la imagen por el desplazamiento de la cámara.
Hay que tener en cuenta que el sujeto debe quedar en el centro del fotograma para adquirir un mayor efecto mientras que el fondo de la foto queda en segundo plano, sin inconveniente de que quede desenfocado. En las imágenes de primer plano, la profundidad del campo siempre es pequeña.
Expertos recomiendan que la cámara se pase al modo de prioridad de abertura AE (Av). Y también se debe aumentar la profundidad de campo con una abertura de objetivo pequeña o reducirla con una abertura ancha y desenfocar el fondo al máximo. La precisión del enfoque es fundamental cuando la profundidad de campo es muy limitada.
Otra cuestión fundamental de la fotografía en primer plano es la iluminación. Es aconsejable acudir a la luz natural para capturar sujetos. Cuando se toman imágenes en interiores, lo ideal es colocar el sujeto cerca de una ventana. En el caso de que la luz solar esté fuerte, hay que colocar una cartulina blanca en el lado del sujeto que queda frente a la ventana para controlar los efectos de la iluminación.
Lo mismo ocurre si es necesario usar la cámara con un flash integrado, en ese caso hay que poner una cartulina blanca alrededor y encima del sujeto. De este modo, el flash que alcance al sujeto se reflejará también desde la cartulina, suavizando y difuminando la luz.
Al momento de la captura es muy importante que el equipo no se mueva, para poder obtener una imagen en primer plano nítida. Es aconsejable ajustar el temporizador de la cámara así se logra un retardo de 2 o 10 segundos entre que se pulsa el botón y el obturador se dispara. Mediante esta opción, es posible anular el movimiento y obtener una fotografía más nítida.
También puede surgir que no sea la cámara la que se mueva sino el sujeto que se quiere tomar en la imagen. En este caso, se recomienda rodear el sujeto con una cartulina o un plástico transparente.